Argentinos/as !!!

La Historia y la Literatura tienen mucho que decir sobre nuestra Identidad. Mi visión no es el único perfil, pero lleva como finalidad la integración del colectivo que consolide la Provincia 25. De manera que funciona como puerta abierta a la memoria y al conocimiento de aquello que, bien o mal, nos pertenece y nos representa. Hecho con afecto para todos los compatriotas...



domingo, 8 de mayo de 2011

"El Monje Negro del Apocalipsis" (Capítulo XXII)



El monje, durante años de paciente búsqueda...siempre decía “basta respirar para que sea posible” o “la fe y la voluntad lo pueden todo”. Lo que buscaba le había costado años de sufrimiento. Debió partir como un fugitivo, a otras tierras y otros horizontes que lo alejaban de su verdadero origen. Pero, sin saberlo, aquel periplo forzado lo llevaría por una nueva senda, la de la búsqueda perpetua por un conocimiento superior...
Supo considerar perspectivas diferentes a las habituales; venía de una aldea y, sin embargo, su pensamiento estaba hecho con un sentido planetario. Sabía, desde sensaciones muy profundas, que si había nacido debía aprovechar tan mágico destino. 
¿Qué sentido tendría la vida si tan solo naciera para morir en el mismo lugar? ¿Por qué aceptar la minúscula parcela si el cosmos era infinito? En definitiva, ¿por qué recluirse en un mundo tan pequeño y precario si se podía romper el molde preconcebido de lo que ya existía?
El tiempo y el espacio no tenían medida, empero, el hombre se esforzaba por estar subordinado a límites mentales.
Había cosas que nunca aprendería entre aquellos que solo veían lo inmediato; si unos debían cubrir la urgencia del alimento diario, otros debían satisfacer sus apetencias en forma de palacios y casas lujosas. Pero ni uno ni otro escapaban a la mediocridad. La vida era una lección en la que los hombres se examinaban todos los días. Si esto era cierto, entonces enfrentaban una y otra vez las mismas preguntas sin alterar las respuestas. El hombre era, en definitiva, un eterno repetidor de curso, incapaz de superar los niveles de prueba hacia un conocimiento superior. Sus intereses se movían a nivel del mar, cuando las posibilidades estaban allá lejos, allí donde reinaba el cosmos.

En el llano se aglomeraban todas las especies para confundirse.

Comprendía, así, que estaba hecho de otra naturaleza. No podía aceptar pasivamente lo que se le había impuesto y lo que se le había enseñado. Y puso en juego su vida. Arriesgó el cuerpo y el alma, sólo por retener una libertad de la que quisieron despojarlo. Conservaba un carácter diferente al de la gente que debía enfrentar, donde era costumbre las agresiones de los individuos estrechos y las instituciones proclamadas como justas...
Debía estar preparado para las circunstancias que vendrían. Toda su vida, hasta aquí, había sido más que una promesa, una realidad completa de nuevas experiencias, inéditas, curiosas, extrañas y, sobre todo, auténticas y tangibles. No necesitaba de terceros para explicar las causas y los efectos. Él mismo fue Ulises en su propio cuerpo. Y aprendía de los hombres y de las mujeres, de los maestros y las diosas-magas, los criminales y las prostitutas. Aprendía en la virtud y en lo perverso, en lo indigno y en lo sublime...

Todo aquel mundo y las bibliotecas y códices prohibidos habían contribuido a formar  una idea cabal de su esencia cristiana pues  su   mente  se  hizo  abierta  y  flexible para aprender de todos, de los paganos y  de los judíos, de las doctrinas orientales y de los estoicos griegos. Era un judío-cristiano, aunque primero había sido y seguía siendo, una lámpara cósmica con la llama encendida agitada al viento...un cometa  atravesando el cielo nocturno, iluminado como una estrella que nunca tuvo tiempo ni medida...

El Monje Negro del Apocalipsis, Capítulo XXII: "El Concilio de Efeso" (Novela Histórica Registrada)
(Puedes solicitar copia completa en PDF a su autor a través de: carca4@alumni.uv.es) 
Carlos Cabrera
         

sábado, 7 de mayo de 2011

Julio Cortázar (1914-1984)

 
 


                               
                          Continuidad de los Parques 

Había empezado a leer la novela unos días antes. La abandonó por negocios urgentes, volvió a abrirla cuando regresaba en tren a la finca; se dejaba interesar lentamente por la trama, por el dibujo de los personajes. Esa tarde, después de escribir una carta a su apoderado y discutir con el mayordomo una cuestión de aparcerías volvió al libro en la tranquilidad del estudio que miraba hacia el parque de los robles. Arrellanado en su sillón favorito de espaldas a la puerta que lo hubiera molestado como una irritante posibilidad de intrusiones, dejó que su mano izquierda acariciara una y otra vez el terciopelo verde y se puso a leer los últimos capítulos. Su memoria retenía sin esfuerzo los nombres y las imágenes de los protagonistas; la ilusión novelesca lo ganó casi en seguida. Gozaba del placer casi perverso de irse desgajando línea a línea de lo que lo rodeaba, y sentir a la vez que su cabeza descansaba cómodamente en el terciopelo del alto respaldo, que los cigarrillos seguían al alcance de la mano, que más allá de los ventanales danzaba el aire del atardecer bajo los robles. Palabra a palabra, absorbido por la sórdida disyuntiva de los héroes, dejándose ir hacia las imágenes que se concertaban y adquirían color y movimiento, fue testigo del último encuentro en la cabaña del monte. Primero entraba la mujer, recelosa; ahora llegaba el amante, lastimada la cara por el chicotazo de una rama. Admirablemente restallaba ella la sangre con sus besos, pero él rechazaba las caricias, no había venido para repetir las ceremonias de una pasión secreta, protegida por un mundo de hojas secas y senderos furtivos. El puñal se entibiaba contra su pecho, y debajo latía la libertad agazapada. Un diálogo anhelante corría por las páginas como un arroyo de serpientes, y se sentía que todo estaba decidido desde siempre. Hasta esas caricias que enredaban el cuerpo del amante como queriendo retenerlo y disuadirlo, dibujaban abominablemente la figura de otro cuerpo que era necesario destruir. Nada había sido olvidado: coartadas, azares, posibles errores. A partir de esa hora cada instante tenía su empleo minuciosamente atribuido. El doble repaso despiadado se interrumpía apenas para que una mano acariciara una mejilla. Empezaba a anochecer.
Sin mirarse ya, atados rígidamente a la tarea que los esperaba, se separaron en la puerta de la cabaña. Ella debía seguir por la senda que iba al norte. Desde la senda opuesta él se volvió un instante para verla correr con el pelo suelto. Corrió a su vez, parapetándose en los árboles y los setos, hasta distinguir en la bruma malva del crepúsculo la alameda que llevaba a la casa. Los perros no debían ladrar, y no ladraron. El mayordomo no estaría a esa hora, y no estaba. Subió los tres peldaños del porche y entró. Desde la sangre galopando en sus oídos le llegaban las palabras de la mujer: primero una sala azul, después una galería, una escalera alfombrada. En lo alto, dos puertas. Nadie en la primera habitación, nadie en la segunda. La puerta del salón, y entonces el puñal en la mano, la luz de los ventanales, el alto respaldo de un sillón de terciopelo verde, la cabeza del hombre en el sillón leyendo una novela.

domingo, 1 de mayo de 2011

Charlas - Conferencias - Cursos (España y Europa)

  
Describo aquí los contenidos sobre los dos temas optativos a desarrollar con el fin de promover la cultura Argentina en España y Europa: 

    "Nueva Revisión de la Historia Argentina"

     PARTE I: 1778/ 1860      

CAUSAS Y CONSECUENCIAS DE LA REVOLUCIÓN DE MAYO

Desarrollo

1- Introducción
2- El Virreinato del Río de la Plata
3- Las Reformas Borbónicas
4- Los antecedentes de la Revolución de Mayo:

Primera Parte:

4a          Independencia de los Estados Unidos (1776)
4b          Rebelión de Tupac Amarú (1780)
4c          Revolución Industrial Inglesa (1780)
4d          Revolución Francesa (1789)

Segunda Parte:

4e         Las Invasiones Inglesas (1806-1807)
4f          Monopolio económico español
4g         Las Revoluciones de 1809
4h         La invasión napoleónica (1808), Renuncia de Fernando VII (mayo de 1808), caída de la Junta de Sevilla (30/01/ 1810)

5- La Semana de Mayo: La Primera Junta
6- Las Expediciones Militares
7- Gobiernos hasta 1820
8- Guerra Civiles
9- Juan Manuel de Rosas
10 Caseros y la Constitución del 53

    PARTE II: 1860 / 1930        
                                             
1  La Organización Nacional                                                    
1.1    El Proyecto intelectual                                                   
1.2    La Trilogía Refundadora                                               
2       La Oligarquía y la Apropiación del Estado.
2.1    Juárez Celman y la Fiebre del Oro.
2.2    El Disparo por la Culata                                               
3       Materia Prima for Export                                                    
3.1    Terratenientes, tierra y poder                                        
3.2    La Producción Agropecuaria  
4       Dulce Capital Británico    
5       La Mentalidad Argentina                            
5.1 La Generación del 80                                                     
5.2    El hijo predilecto de Buenos Aires                                
5.3    Los “gringos” del Viejo Mundo                                     
5.4    El gaucho: Hijo de la Barbarie                                       
6     Conclusiones de un Modelo Neocolonialista     
                        
              PARTE III: 1930 / 2001

         1- La Década Infame
         2- Juan Domingo Perón
2.1      El 17 de Octubre de 1945
2.2  Perón o Braden
2.3  Eva Perón
2.4  Segundo Gobierno
         3-  La Trilogía de oro de la Literatura Nacional (B/S/C)
         4-  La Generación del 68 y la Revolución ideológica
         5-  Retorno de Perón. Gobierno de Isabel
         6-  Dictadura Militar 1976/1982 
         7-  La Guerra de Malvinas
         8-  Con la Democracias se come, se educa, se cura...
       
   
  "LOS ORIGENES DE LA VIOLENCIA DE GÉNERO EN OCCIDENTE"

         BASE TEMÁTICA

a)La construcción del concepto mujer en la Cultura Occidental.
b)Lo que griegos y romanos modelaron y el cristianismo impuso.
c)Esposas y Esclavas: El modelo ideal. 

d) La versión Argentina de la Literatura Clásica.


UNIDADES / CONTENIDOS

1) La Mujer Micénica y las Mujeres de Homero

·         La Mujer en la Edad del Bronce
·         Los Modelos Homéricos
·         El Origen de la Misoginia

2) La Mujer Griega del Período Clásico

·         La Mujer en Atenas
·         La Mujer en Esparta 

3)      La Mujer Romana

·         Esposas, Rameras y Esclavas
·         Mujer y Poder

4)      La Formación Conceptual de la Mujer en los Orígenes del Cristianismo

·         Las Referencias Bíblicas
·         La Representación de la Virgen María y María Magdalena
·         Mujer Pagana – Mujer Hereje
·         Construcción del Discurso Cristiano Sobre la Mujer

5)   Antígona Clásica y la versión Nacional "Antígona Vélez"